La Razón de la Navidad
(De mi libro Escritos para el Alma vol. 2)
Viene navidad y con ella la época de; fiestas,
regalos, vacaciones, luces, comidas, reuniones familiares, abrazos y cuantas
otras cosas más para celebrar. Pero; ¿saben todos cual es la verdadera razón de
la vanidad?... Bueno, aquí estoy de nuevo para conversar sobre este tema y
desde ya espero que Dios pueda llegar a su corazón y os de el entendimiento
sobre lo que es esta bella época.
Navidad, viene de la palabra latina
“Nativitatem” que significa; “Nati” nacimiento, “vita” de la vida “tem” para
ti, es decir que traducido a nuestro español equivale a decir “nacimiento de la
vida para ti.” De allí partimos en utilizar la palabra “natalicio” para
referirnos al día de tu nacimiento y navidad para referirnos al nacimiento de
Jesucristo, El Salvador del mundo.
Feliz navidad; es una frase muy popular en esta
época pues en todo el mundo escuchamos decir “feliz navidad” pero; ¿cuál es el
verdadero significado de esta frase la cual muchos dicen sin comprender? Al
decir Feliz Navidad estamos diciendo “felicidades nació El Salvador.” Que
interesante que con esas palabras estamos diciendo al mundo que Jesucristo, el
Mesías, el Hijo de Dios ¡ha nacido!
La celebración de la navidad es una celebración
que cada año que transcurre va perdiendo su verdadero significado. Les escribo
desde un país anglosajón donde la frase “feliz navidad” (Merry Christmas) a
sido ya suplantada por la de “Feliz Época” (Happy Season) y el personaje que es
motivo de la navidad JESUS, ha sido substituido por el de un personaje ficticio
“El Santa Claus” ó “Father Christmas” (El Padre de La Navidad).
Con estos cambios Satanás está ganando terreno
en este mundo pues las nuevas generaciones desconocen de Jesucristo y son
alimentadas del conocimiento de este falso y gordo personaje vestido de rojo
con barba blanca.
Jesús es el verdadero motivo de la navidad;
Para muchos en el mundo moderno Jesús no es más
que un gran maestro, un gran profeta ó como muchos creen; un lunático
mentiroso. Durante su ministerio en la tierra Jesús pregunto a sus discípulos;
¿Quién dicen los hombres que soy yo? Y la respuesta que encontró fue: Ellos
dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de
los profetas. Pero, ante tal respuesta Jesús les pregunta
nuevamente; ¿quién decís que soy yo? Y aquí encontramos la respuesta más
importante y verdadera que hombre jamás haya podido decir; 16Respondiendo Simón
Pedro, dijo: “Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente” (San Mateo
16: 13 al 16). Mi amigo, en esta época de la navidad, quiero preguntarte; ¿Quién es Jesús para ti? y también
dime; ¿Qué puede hacer Jesús por ti en
esta tierra y en la eternidad? Permite ahora explicarte el ¿por qué vino Jesús
al mundo? Y sobre todo ¿Quién es Jesús?
Jesús es el Gran Eterno Dios;
El relato Bíblico
nos dice en Génesis 1:
1 que “En el Principio creo Dios los cielos y la tierra”, es decir Dios fue el
creador del universo, la tierra y corono su creación con la formación del ser
humano a su imagen y semejanza. Luego, en San Juan Capítulo 1: leemos; “1En el principio era el verbo, el
verbo era con Dios y el verbo era Dios. 3Todas las cosas fueron
hechas por él 10En el mundo él estaba y el mundo por el fue hecho”. Como
he dicho anteriormente, Dios formó al hombre. Leemos en Génesis Capítulo 2; “7y
Dios formó al hombre del polvo de la
tierra, y sopló en su nariz aliento de vida” Dios nos creó dándonos la vida
y nos dejó en perfecta comunión con él.
La Caída del hombre;
Después de la creación, el hombre (Adán y Eva)
cayeron de la gracia rompiendo esa hermosa comunión por ser desobedientes a su
creador.
Génesis Capítulo 3; Nos dice;
“1 Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que
Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No
comáis de todo árbol del huerto? 2 Y la mujer respondió a la
serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; 3 pero
del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él,
ni le tocaréis, para que no muráis. 4 Entonces la serpiente dijo a
la mujer: No moriréis; 5 sino que sabe Dios que el día que comáis de
él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el
mal. 6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era
agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de
su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella. Así, se rompió la comunión entre
Dios el creador y el ser humano, pues la creación toda se contamino por el
pecado de la desobediencia”.
Como consecuencia, se creó la separación entre
Dios y el hombre pues Dios mismo los hecho de su presencia. Continuamos leyendo
en Génesis Cap. 3:
“8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto.9 Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú? 10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí. 11 Y Dios le dijo: ¿Quién te enseñó que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol de que yo te mandé no comieses? 12 Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí. 13 Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí 20 Y llamó Adán el nombre de su mujer, Eva, por cuanto ella era madre de todos los vivientes. 21 Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió. 22 Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. 23 Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. 24 Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.
Jesús viene en busca de su creación;
Por largos 4 mil años, Dios buscó a su creación
enviando mensajes por medio de sus profetas llamándoles a buscar un
arrepentimiento y volverse a Dios. Mensaje que siempre fue rechazado por el
mundo. Cuatro mil años después, Cristo cumple la promesa de rescate viniendo él
a este mundo en carne y hueso para buscar y redimir a su creación perdida. Y
esta es la razón de la navidad, “Cristo
Vino al mundo a buscar y salvar lo que se había perdido”.
1 Pedro 2:
“4 Acercándoos a él, piedra viva, desechada
ciertamente por los hombres, mas para Dios escogida y preciosa, 5 vosotros
también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio
santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de
Jesucristo.6 Por lo cual también contiene la Escritura: He aquí, pongo en Sion
la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa; Y el que creyere en él, no será avergonzado. 7
Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso; pero para los que no
creen, La piedra que los edificadores desecharon, Ha venido a ser la cabeza del
ángulo;8 y: Piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo desobedientes;
a lo cual fueron también destinados.”
Isaías 9: “6Porque
un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se
llamará su nombre; Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de
Paz”
Este es Jesucristo, quien lleva por nombre; Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Nadie puede usar estas calificaciones a no ser que sea DIOS MISMO.
Es mi deseo invitarte a que esta navidad no sea
una más en tu vida, si no que sea esta la de tu encuentro con tu Salvador
JESUCRISTO.
El Propósito de La navidad; es que tu tengas
vida eterna con él en la eternidad. La forma de formar pare de la gran familia
de Dios es; entregando tu vida a Cristo Jesús recibiéndolo como tu Salvador
Personal. Te invito a que lo hagas ahora que has comprendido cual es La Razón de La navidad.
Di con tus palabras y con tu corazón:
Jesús, gracias por tu amor por mí. En esta
época de navidad quiero volver mi vida hacia ti y recibirte en mi corazón.
Perdóname, soy pecador. He vivido alejado de ti pero ahora vuelvo a ti. Gracias
por venir a buscarme, hoy te entrego mi vida.
En tu nombre, ¡amén!
Recuerda; Cristo vino para darte vida eterna a
ti (Nativitatem)
Ahora, cuéntame de tu decisión y busca una
iglesia donde congregarte.
Tú hermano y amigo
Gustavo.-
Este escrito forma parte de mi libro; Escritos para
el alma Vol. 2
Levántate Y Brilla
-Está en ti-
